Son los puntos que nos separan aquellos que más nos unen,
¿no serán las pausas las promesas que nos reúnen?
Son éstas, mis etéreas entrañas, que suplican que aquí mores.
Son éstas, ahora extrañas, tus alfileteros de mis dolores.
Que por más que te ruegue, por dentro mi vida muere.
Fuiste tú y fuiste yo
Fui un yo que el tú no entendió.
Fui el tú que en ti no había
Porque este yo siempre sabía
que, por ti,
moriría
por ti, que
antes tanto quería.